CUADROS MANISES: La pintura al óleo

La pintura al óleo es una técnica que consiste en mezclar una composición de resina y aceites con pigmentos. Los aceites le dan más fluidez a la pintura y con los pigmentos se juega con la espesor y dureza de la pintura. Pintar con esta técnica proporciona grandes ventajas que se pueden apreciar en el trabajo final de los artistas. Con la técnica de pintura al óleo se pueden conseguir muchas tonalidades de colores, la calidad de los colores que se consigue es muy alta y una vez se ha secado la pintura continua teniendo un color vivo y potente. Por este motivo podemos decir que las tres ventajas principales de la técnica de pintar al óleo son las siguientes: color excelente, se tiene el control del espesor o la fluidez de la pintura y el material es persistente en el tiempo conservando la buena calidad de las pinturas.

Óleo sobre lienzo

La pintura al óleo se empezó a utilizar en la Edad Media sobre tabla. En la Edad Moderna el soporte para pintar cambiaría y se empezaría a pintar sobre lienzo en bastidor de madera. Más concretamente será a partir del S.XVII, en el barroco, cuando los pintores elegirán como soporte de sus pinturas al óleo el lienzo porque es más práctico que la tabla sobretodo para obras de grandes dimensiones. Es en este punto cuando los artistas se referirán a sus obras de arte como lienzos u óleos y no como cuadros.
En el S.XIX aparecerán nuevos pigmentos gracias a los avances de la química que permitirán conseguir más colores y obtener más tonalidades.
Ya en el S.XX la versatilidad de la técnica de la pintura al óleo hará de esta técnica pictórica el mejor medio de expresión para el artista.

Dentro de la pintura al óleo encontramos diferentes técnicas ya que su versatilidad permite aplicarla de diferentes modos. Las diferentes técnicas utilizadas en la pintura al óleo son las siguientes:

Pintura por capas: la pintura por capas consiste en aplicar varias capas de pintura durante varias sesiones.
Alla Prima: al contrario que la pintura por capas se realiza en una sola sesión de pintura continua.
Técnicas ópticas: entre las técnicas ópticas encontramos dos tipos las veladuras y el pincel seco. En las veladuras se aplica una capa delgada de color transparente o semitransparente sobre otro generalmente opaco y de un color más claro pero siempre sobre capas totalmente secas. En la técnica de pincel seco se aplica el óleo sobre otra capa de pintura seca.
Técnicas para dar texturas y otros efectos: dentro de esta técnica encontramos la técnica del impasto y la del frotado. La técnica del impasto se realiza aplicando grandes cantidades de pintura espesa. La técnica del frotado consiste en dar textura a la obra con la ayuda de un papel no absorbente u otros materiales.